Manolita y yo 1968
Manolita y yo 1969
Leonor, Cecilio, Manolita y yo
en la boda de Cecilio, 1969
En el convite de la boda de
Firmando la sentencia a perpetuidad
Salida del suplício
Consuelo de los amigos
mejor el trago
En Barcelona en los años de 1965 al 1970, me ocurrieron varias cosas, el año 1968 me cambie de trabajo comencé a trabajar en una multinacional Americana que se llama Masoneilan, S.A. estaba situada en la Diagonal-Muntaner y los talleres estaban en la calle Alba, 1 ,situado en el barrio de Gracia, me cambie de empresa por el horario ya que era jornada intensiva de 8 a 15, así que tenía todas las tardes libres, para leer, ir al cine o escuchar música, aunque en el mes de marzo de 1968 conocí a una persona que hizo cambiar mi vida, me refiero a mi esposa Manolita, empecé a salir con ella con la misma intención que con las otras, pero a los tres meses me di cuenta de que aquello era diferente, y como el tiempo da razones llevo cuarenta años compartiendo mi vida con ella.
Mi vida la comparo a un árbol, en Extremadura tengo las raíces, el tronco me salió la mayor parte en Sagides (Soria) y la otra parte en Huelva, las ramas en Barcelona, las hojas y las flores cuando conocí a Manolita y el fruto cuando nacieron mis hijos, en fin es una forma de definir mis estancias en diferentes puntos de la geografía española.
Al cambiar de trabajo conocí a muchas personas que serían grandes amigos míos, recuerdo en administración a Mª Teresa Gimeno, Antonio Mumbardó, (una gran persona, aunque un poco rácano), José Mª Zahonero, Antonio Casbas ( una de las mejores personas que he conocido), al poco tiempo entró en el departamento Carmen Alfonsea, Mercedes Lozano, Teresa Alfonsea, Ramón Vázquez, en el departamento comercial estaba Juan Suñol, Alejo Simeón, Carlos Vidal, en el transcurrir de los años fui conociendo a muchas personas más, los que trabajaban en la calle Alba no tenía mucho contacto con ellos, pues sólo los veía una vez al mes, no obstante recuerdo a Josefina García y a Joaquín Boix.
En el mes de Noviembre de 1968 nos entregaron el piso, compramos algunos muebles y fue ocupado por Manolita, le iba bien pues trabajaba cerca y podía ir andando a su trabajo, mis padres vivían también en Barcelona, aunque estaban a punto de jubilarse, acordamos celebrar la boda en el mes de agosto de 1969 aprovechando las vacaciones, en el mes de enero de 1969 se jubiló mi padre con setenta años y se marcharon a Sevilla con mi hermano Manolo, terminamos de amueblar el piso y como niño con zapatos nuevos disfrutamos de de nuestra independencia, aunque como todo el mundo teníamos nuestra hipoteca y nuestras letras, ya que en aquella época las cosas no estaban tan fáciles como se cree la juventud, los intereses al 17% y subiendo al final creo que llegamos a pagar el 20% en fin que en todas las épocas hemos tenido nuestras dificultades.
Recuerdo que el día tres de agosto se casó Cecilio y Leonor, siendo yo el padrino de su boda, él me devolvió la pelota siendo el padrino de mi boda, somos grandes amigos desde hace muchos años, el último año que pasé en Sagides, Cecilio, Felix (el maestro) y yo éramos inseparables
Por fin el 14 de agosto de 1969 tuvo lugar nuestra unión matrimonial, hicimos el viaje de novios a Palamós ( en aquella época no se iba a Punta Cana ni tan siquiera a Tenerife, o se iba a la Costa Brava o a Mallorca), estuvimos en un hostal quince días, vinimos la mar de morenitos cuando nos incorporamos a nuestros trabajos, la situación económica no estaba muy bien, pues comenzamos una crisis con recortes por parte de los bancos tanto de créditos como de descuento de papel comercial, los riesgos los recortaron y las empresas pasaron una mala época, la economía se fue recuperando un poco a final de año.
En el año 1969 Masoneilan, S.A. empezó a construir una nueva fábrica en la Zona Franca, la cual tendría dos plantas en la baja se situarían los talleres y en la alta las oficinas, se termino en septiembre de 1970, recién venidos de vacaciones hicimos el traslado, después de algunas negociaciones con la empresa logramos que nos pusiera un autocar que saliera de cerca de la antigua fábrica ( Bailen-Mª Claret).
Al estar todos juntos conocí más a fondo al personal que trabajaba en la calle Alba, como a José Mª Jover, Joaquin LLansó, Maria Teresa Durán, Juan Vidal y un largo etc. Creo que con todos me llevé siempre bien, recuerdo las fiestas de Navidad, hacíamos intercambio de regalos por sorteo y la empresa nos invitaba a un copioso aperitivo.
3 comentarios:
Muchacho, que creía que no encontraba el comentario, mira que estas loquillo, me ha hecho mucha gracia como has definido las bodas ji ji.
Mira que tienes memoria, y esta bien que pongas las dificultades que se tenían entonces, porque parece que es ahora solo cunado tiene la gente hipotecas, y recortes, y necesidad.
Y me quejo yo en mi blog de que a lagente le molesta que cuente uno su vida por aqui???!!!
si vieran tu blog, alucinarian...
volvere por tierras catalanas en marzo si todo va bien aunque no les haga mucha gracia a los mios.
saludos.
HOLA VICENTE, MUCHAS GRACIAS POR TU COMENTARIO. Y BUENO, CLARO QUE TENGO TIEMPO PARA CONTESTARTE, ADEMÁS BASTA DE QUE ME HAYAS ESCRITO UN BONITO COMENTARIO PARA QUE SAQUE UN RATO DE DONDE SEA, ES MÁS TODOS TENEMOS ESE RATITO, LO IMPORTANTE ES QUERERLO UTILIZAR PARA HABLAR CON LA GENTE. YO AQUI EN VILLANUEVA CONOZCO POCA GENTE, YA QUE SOY VILLANOVENSE DE ADOPCION, LLEVO VIVIENDO AQUI 4 AÑOS, EL RESTO DE MI VIDA HE ESTADO EN MUCHOS SITIOS, Y EL ULTIMO HA SIDO 20 AÑOS EN MONTERRUBIO. PERO EL APELLIDO GINESTAL ME SUENA MUCHO, LO QUE NO SE ES LA CANTIDAD DE GINESTALES QUE HAY EN VILLANUEVA, JEJEJE.
BUENNO HASTA OTRO RATITO. UN SALUDO
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